Alex Honnold y la escalada libre
Considerado uno de los escaladores profesionales más relevantes del mundo actual, Alex Honnold se define a sí mismo como un apasionado de la escalada, la naturaleza y el deporte.
Nació en 1985 en California, Estados Unidos y desde muy pequeño comenzó a sentir curiosidad por la escalada. Al principio trepaba árboles, paredes artificiales y hasta los exteriores de las casas; pero a medida que él iba creciendo, crecía también su amor por la escalada libre y el tamaño de sus retos.
Actualmente, se destaca en la escalada de aventura en roca en forma de solo integral, que es un estilo de escalada libre que se vale sólo del cuerpo para subir una pared rocosa. No utiliza cuerdas, arneses ni protección de ningún tipo para ayudarse en el recorrido.
El tipo de escalada en solo, en la que Honnold se especializa, se basa entonces únicamente en la fuerza y habilidades del cuerpo, junto con técnicas de agarre para poder escalar. En general también llevan consigo un bote de tiza, que permite secarse las manos y transformarlas en mejores herramientas que los lleve hasta la cima.
La escalada libre en solo requiere de un gran entrenamiento, pero a la vez es un método simple y rápido de llegar al destino. Se caracteriza también por los altos niveles de adrenalina y la necesidad de tener una concentración intensa, ya que su vida depende de su cuerpo y los movimientos que haga.
Con su frase de cabecera “No Big Deal” (No es gran cosa) ha reunido seguidores de todas partes del mundo gracias a sus hazañas y a su humilde forma de aceptar la fama y el reconocimiento. Éstos no le interesan, sólo busca poder vivir de escalar hasta que su cuerpo lo resista.
Grandes hazañas
En el 2017 logró un reto que le valió reconocimiento mundial, completó una escalada en solo en la formación rocosa El Capitán, que tiene más de 900 metros de altura. Así, Honnold se transformó en la primera persona en realizar esta ascensión únicamente con su cuerpo, zapatillas de trepar y un bote de tiza colgando de la cadera.
Esta hazaña fue filmada para un documental producido por National Geographic, en el que se muestra todo el camino, esfuerzo y finalmente victoria del escalador hacia una de las paredes rocosas más altas del país, ubicada dentro del Parque Nacional de Yosemite. El documental “Free Solo” fue nominado para los Oscar en su categoría, y este reto fue considerado una de las más grandes hazañas del atletismo que jamás se han visto.
Durante 10 años, Honnold tuvo en mente el reto y se entrenó para este de la manera correcta, buscando conquistar El Capitán. Para prepararse, escaló varias veces la pared con cuerdas y compañeros, estudiando todas las grietas de ésta y los movimientos que debía hacer para escalar con seguridad, ya que un error en la escalada en solo puede resultar fatal.
Por otro lado, entre sus ascensiones más importantes podemos mencionar que ganó el récord mundial en velocidad en la pared The Nose, también en el Valle de Yosemite, en un tiempo de 2 horas, 23 minutos y 51 segundos. También fue ganador de Triple Corona en la categoría solo libre en las paredes de: Mount Watkins, El Capitán y Half Dome.
Buscando siempre nuevas paredes para escalar, fue el primero en realizar solo libres en los siguientes lugares: Moonlight Buttress y la cara noroeste del Half Dome en el 2008, el Half Dome en 2012, el macizo Fitz Roy en la Patagonia en 2014 y en el Freerider, parte de El Capitán, en 2017.
La trayectoria deportiva de Honnold se caracteriza por la variedad de retos, ya que busca constantemente nuevos desafíos para poner su cuerpo y mente a prueba, y empujar sus límites. Es por eso que se destacan en su carrera hazañas impresionantes, algo que sólo un verdadero amante de la escalada es capaz de lograr.
La escalada libre como un estilo de vida
La necesidad constante de superación y la búsqueda de nuevos desafíos es lo que mueve a Honnold a aventurarse en nuevos retos cada año. Lo más importante para él es poder vivir de lo que ama, la escalada, sin importarle el dinero o fama que llegan con ésto.
Con la humildad que lo caracteriza y las ganas de estar siempre en movimiento, vive en una van, con las comodidades mínimas y durmiendo cada día en un lugar distinto. Este estilo de vida es el que le permite viajar y escalar por todo el país, dándole la libertad que ansía.
Aunque él preferiría vivir en una cómoda casa más que en una pequeña van, sabe que es la forma más funcional para poder vivir como él lo hace: siempre en la ruta y siempre buscando nuevas paredes para escalar y conquistar.
Por otro lado, Honnold se enorgullece de ser un vegetariano en el ámbito deportivo, demostrando que no hace falta comer carne para ser un atleta de alto nivel. Su elección de dieta se debe principalmente a que es consciente de lo que pone en su cuerpo, ya que es su herramienta de trabajo, y piensa que todos deberíamos serlo.
Además, por ser un deporte que se desarrolla en la naturaleza, Honnold es un gran amante del medioambiente, por lo que predica a favor de la conciencia ecológica sobre los productos que consumimos y usamos en nuestro día a día.
Recopilando todas sus hazañas más impresionantes, el atleta publicó un libro llamado “Alone in the Wall” mostrando los riesgos que asume en cada escalada, pero también cómo enfrenta la vida sin temores, persiguiendo su pasión.
Por otro lado, participó de muchos comerciales y documentales de aventura, y pudo realizar varias escaladas viajando por Europa, China, Marruecos y muchos países más buscando nuevos paisajes para descubrir.
Mucho más que un escalador
Como mencionamos antes, Honnold se caracteriza por su humildad, su amor al medioambiente y con una única fijación en su mente: la escalada. No le interesa la gran fama o las grandes cantidades de dinero que pueda hacer, él sólo necesita de una van y de sus manos para escalar y ser feliz.
Sin embargo, su pasión y determinación en el deporte hizo que efectivamente consiguiera fama mundial y mucho dinero en sponsors, comerciales, documentales y más. Es por eso que Honnold decidió darle un buen uso a todo ese dinero.
Guiado por su pasión por el medioambiente, creó la Fundación Honnold, que se encarga de brindar energía solar a familias necesitadas en distintas partes del mundo. Facilita el acceso de energía limpia a las personas de bajos recursos para que puedan reducir su consumo de energía en el hogar, o al menos tener una fuente de energía, y contribuir al planeta con el uso de energía verde.
Además, la fundación apoya iniciativas de energía limpia de todas las fuentes posibles, para crear un mejor equilibrio en el mundo y garantizar que todos puedan acceder a este tipo de recurso. A través de la fundación, el trabajo de Honnold tiene un impacto positivo, algo que él valora mucho.
Aunque para muchos sea difícil de comprender por qué un deportista pondría su vida en riesgo en cada escalada, para Honnold es una forma mucho más simple y rápida de lograr sus metas y de conectarse con el deporte que ama.
La simplicidad de este deporte, partiendo del enfrentamiento de una persona contra una pared de roca sin ninguna ayuda, es lo que él cree que despertó la curiosidad en las personas. Es un deporte simple de entender y que genera adrenalina, por ser riesgoso. Además, demuestra el poder y fuerza que pueden tener nuestro cuerpo y mente si nos lo proponemos.
Para Honnold y muchos otros, la escalada libre en solo no es únicamente un deporte, sino que es una forma de vida en la que los escaladores quieren superarse cada día, buscando el próximo desafío y entrenando su cuerpo, para poder llegar cada vez más alto.